Κυριακή 19 Οκτωβρίου 2008

El acto puro.

¿Cómo rellenar las horas de insomnio? Elegí releer textos viejos, anotaciones de otros tiempos y, casi, de otra persona. Produce una sensación extraña eso de leerse y no encontrarse en esas letras. Sentir que son de un extraño, parecido a alguien que tal vez conoces; que vienen de una imagen difuminada, que no tiene límites claros, que podría ser cualquiera.
Las preocupaciones son tan distintas ¿en qué momento dejé de impresionarme por las maravillas de un domingo o por la fragilidad de la memoria? ¿qué hice, qué no hice, para que todos los pensamientos se relacionen con trabajo, con obligaciones, con terror a la mediocridad?
Quiero volver a lo simple, a la dilucidación de problemas realmente importantes, que no implican un cheque a fin de mes, que no conllevan la sonrisa de satisfacción de un vejete que vagamente conoces, que no precisan de una buena evaluación. Quiero volver a lo que no se necesita. Lo que no es medio para llegar a nada. Es acto puro.
Al final, la única idea que ronda mi cabeza es la dolorosa noción de lo difícil que puede llegar a ser convertirse en lo que nunca se quiso ser.

2 σχόλια:

vylia είπε...

Conociendo Clara. ¿También tú padeces insomnio? A veces me lastima totalmente no poder descansar. El resto del tiempo no pienso en eso.

Un abrazo, gracias por pasar a mi blog.

Unknown είπε...

Quizás los remolinos de la vida llaman a una formación y deformación del sentir.
Aunque uno explote constantemente, avanza, un día vas ser colores y un energía te abrazará y se expandirá en ese instante, en esa formación y deformación que traen los giros, sólo está en ti producir el gesto.
Mira el cielo entre las 6 o 7 de la tarde es el mejor momento quizás para poner una linda canción maravillarte y quién sabe, descubrir algo nuevo en menos de 5 minutos o quizás unas horas más tarde.
Siento empatía con algunos de tus escritos, sigue sintiendo
¡gracias! =.)